Francisca Martín, la insignificante mandadera del monasterio de la Concepción en la villa segoviana de Ayllón, ha sido pastora en su pueblo hasta que decidió huir de un padre brutal y de la amenaza de un matrimonio impuesto. Nadie diria que tras su humilde aspecto se esconden una brillante inteligencia y un talento especial para descubrir enredos yoscuras tramas criminales. A lo largo de sus investigaciones, pondra de manifiesto su peculiar sentido de la justicia y defendera su dignidad como mujer, en una sociedad en proceso de cambio y que los varones se empeñan por controlar cada vez con mas dureza. Pero tambien tendra que enfrentarse a los fantasmas de un pasado que le ha enseñado a valorar la libertad por encima de todo.
Año 1482. Terminada la guerra civil, con Isabel I instalada en el trono y su sobrina Juana de Castilla encerrada en un monasterio en Portugal, parece que la paz va regresando a la Corona de Castilla, ahora sin trabas que dificulten sus avances en todos los ambitos. Sus prosperos mercaderes se hallan extendidos por Europa y gozan del respeto general debido a la eficacia y honradez de sus actividades; por otra parte, y de forma paralela, llegan creadores extranjeros que modificaran los estilos artisticos, dando lugar a obras esplendidas en algunas de las cuales colaboro activamente doña Mencia de Mendoza y Figueroa, mecenas y coleccionista cuya sensibilidad para el arte se manifiesta, por ejemplo, en la magnifica capilla funeraria de los Condestables en la catedral de Burgos, comenzada en el momento en que se desarrolla la accion de la novela, en la que doña Mencia tiene un papel preponderante. En este entorno abierto a todas las posibilidades, una inocente doncella en busca de la identidad que nunca tuvo y dos caballeros acosados por sus origenes deben recorrer las tierras de Castilla y de Leon desde Burgos hasta Zamora. El viaje, motivado por un crimen, permitira a los personajes descubrir un mundo que, a pesar de su aparente tranquilidad, se halla abocado a grandes transformaciones. Un mundo fascinante para la dama y quienes la acompañan, aunque en ningun momento pueden olvidar que sobre ellos planea inexorable la sombra de la muerte dejando tras si un rastro de asesinatos.