Esta es la historia de un hombre herido: Paul Soler Hewitt, el verdadero catalizador, la justificación primera y última de esta historia enferma de animales destrozados. Fue un adolescente egoísta, manipulador y sociopata, marcado para siempre por el amor imposible hacia el amante de su tio. Su talento innato y la ayuda de su abuela, una rutilante estrella de Hollywood ya retirada, le hicieron triunfar en la meca del cine desde muy joven.Ahora, a sus treinta años, se ha convertido en un angel oscuro de terrible belleza. Modelo exclusivo de exito, el mejor de su generacion, es un iman que atrae todas las miradas. Esta en la cima del mundo, admirado y envidiado por todos. Pero su existencia anterior es un estigma que supura rencor envenenando su vida y que solo encuentra lenitivo en el descenso a los infiernos a traves de la deformacion extrema y masoquista del placer y la posesion sexual.Cuando encuentre de nuevo al causante de su enquistado dolor sera el tiempo de una venganza catartica de inesperadas consecuencias para sus protagonistas.
1979. Pablo Soler, 29 años, llega a Nueva York, capital del mundo, para trabajar en las Naciones Unidas. Su historia es la de una fuga que no responde a un plan prefijado y no tiene un objetivo final. Huye, simplemente, esperando (¿sabiendo?) que un cambio de escenario, un mundo completamente distinto, quiza sea el motor que le falta para vivir plenamente. En su huida hacia adelante dejara atras a su familia, una España de recien adquirida democracia y la figura represora de un padre afecto al regimen franquista. Sus primeros dias en la ciudad caminan al dictado del azar, y este no tardara en hacerle conocer a las dos personas mas importantes de su vida: Sean Higgins, su futuro gran amor, y Daniel Herst, el enigmatico abuelo Herst. Como si acabara de nacer, en su vida comienza a salir el sol mientras Nueva York, un personaje mas, le abre sus puertas de par en par. Su vida dara un vuelco que le llevara al mundo de la television, el cine y la literatura, ensamblando un triunfo tras otro. Pablo ira asimilando todos estos cambios, abriendose e ilusionandose prudentemente; dejandose llevar y, muchas veces, dejandose arrastrar. Aunque haya algo que quiza nunca cambie en el: su falta de determinacion, de confianza en si mismo, la represion de sus emociones mas intimas y un sentimiento de culpa, una pulsion orgullosa, autodestructiva, que le hace plantearse si todo lo que ha logrado tiene una fecha de caducidad.