Para la Madre Teresa de Jesús el objetivo de la educación que brinda a quien se pone al alcance de su magisterio no es otro sino el de conducirle desde la tierra estéril que es, hasta su transformacion en autentico vergel. Y porque lo dicho no fue en ella una simple declaracion de intenciones, sino un sin fin de objetivos conseguidos, es por lo que se merece con todo derecho el titulo de educadora. Y ello, con la misma justicia con que se ha merecido los de mistica, escritora, fundadora, etc. De demostrarlo cumplidamente tratan estas paginas.