No fue la suerte, ni el toro tal o cual. Fue su voluntad de hierro, forjada sin descanso desde ue tuvo uso de razón, la que doblegó los obstáculos que pretendían negarle el futuro. Luchó sin desfallecer y gano. Triunfo el Hombre. Y surgio el Toreo. Esta es la historia, o al menos una forma de contarla, de Juan Antonio ruiz "Espartaco", un triunfador al que persiguio el fracaso desde que abrio los ojos de la razon y miro a su alrededor. desde que apenas habia cumplido 11 años y para tener contento a su padre se inicio en el mundo de los toros, hasta que bastante tiempo despues logro enamorarse y triunfar en la profesion que el no habia escogido, fueron muchas las circunstancias adversas que le salieron al paso.Un dia... otro..., un año... otro año... Nada. No habia recompensa para sus esfuerzos. Abandonar, dejarlo, nomerecia la pena seguir o, peor, no se lo podia permitir: tenia que bjuscarse la vida de otra manera para "ayudar a su gente". Y a punto estuvo de renunciar, de tirar la toalla. No lo hizo. en un momento epico tomo la decision de luchar,siguio adelante. Gano. Al poco llego el triunfo y paso de la nada al todo. No hubo milagro, unicamente que el hombre, luchando contra los fantasmas del fracaso, fue capaz de sobreponerse, una vez mas, hasta conseguir su objetivo: "hacerse" torero, "hacer" al torero: convertirse en el idolo que estuvo a punto de no ser.