Editorial: Publicaciones de la Residencia de Estudiantes
ISBN: 9788495078834
Número de páginas: 128
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 01/04/1998
Año de edición: 1998
Plaza de edición: Es
Colección:
Catálogos de exposiciones
Catálogos de exposiciones
Alto: 24.0 cm
Ancho: 21.0 cm
Peso: 480.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Federico García Lorca y Salvador Dalí
Fuente Vaqueros, (1898-1936). Federico García Lorca, poeta y dramaturgo, pasó los primeros años de su infancia en su pequeño pueblo granadino antes de marchar a Granada para estudiar en la Universidad. Allí conoció a Manuel de Falla, personaje que ejerció gran influencia sobre él, transmitiéndole el amor por el folclore y lo popular. Años más tarde, se trasladó a la Residencia de Estudiantes de Madrid, donde Lorca se dedicó con pasión a la música, el dibujo, el teatro y la poesía. Su obra se caracterizó por poseer un lenguaje personal, inconfundible, que residió en la asimilación de elementos y formas populares combinados con audaces metáforas, y con una estilización propia de las formas de poesía pura con que se etiquetó a su generación.
Figueres, 11 de mayo de 1904 - 23 de enero de 1989. Salvador Dalí se dedicó al dibujo y la pintura desde muy joven, en 1922 empezó los estudios de Bellas Artes en Madrid. Durante su estancia en la Residencia de Estudiantes mantuvo una gran amistad con el poeta Federico García Lorca y el cineasta Luis Buñuel, con los que llevó a cabo numerosos proyectos artísticos vanguardistas. Después de estudiar en Madrid y de participar en los debates artísticos renovadores de los años veinte en Cataluña, Salvador Dalí se marchó a París y se integró en el grupo de pintores y escritores surrealistas. En 1929 conoció a la joven rusa Helena Diakonova, conocida con el sobrenombre de Gala, que desde entonces se convertiría en su modelo y compañera. Coincidiendo con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, Salvador Dalí y Gala se establecieron durante unos años en los Estados Unidos, donde su pintura de estilo realista y onírico tuvo mucho éxito. Convertido en uno de los pintores más famosos del momento, en 1948 volvió a vivir a Europa y realizó largas estancias en su casa y taller de Portlligat.