Toda persona sincera consigo misma debería situartse ante Nietzsche en algún momento de su vida. Este libro pretende propiciar ese encuentro. No se trata de sistematizar su filosofía ni de hacerla más fácil, porque Nietzsche odiaba los sistemas y porque su pensamiento no es algo que se explica sino referente ante el cual el lector se explica a sí mismo, sino de suministrar los contextos biográficos necesarios para que su lectura resulte, si cabe, más apasionante.
El libro constituye una investigación de caracter estético sobre el movimiento simbolista, centrado en la figura de Charles Baudelaire, el gran poéta francés del siglo XIX que es cabeza de dicho movimiento: sensualismo, dandysmo, spleen, el mal, la metrópoli, la teoría de las correspondencia entre naturaleza y espíritu...