El gran artista del Surrealismo, Salvador Dalí, rebasó los límites de su vocación pictórica, cuando decidió embarcarse en la tortuosa aventura de diseñar joyas. Dalí marcó sus joyas con los temas y mitos que le fueron mas queridos y usuales. Sus creaciones constituyen bellisimas obras de joyeria que llevan el sello personal e indeleble de Dali. El pintor traduce en piedras y perlas su universo fantastico de corazones sangrantes, ojos cronometros y relojes blandos.