Libros de Diccionarios de religiones, página 13 de 625

La exploración histórico-teológica del misterio de la Iglesia, que la BAC publica hoy, en coedición con el Estudio Teológico de San Ildefonso, constituye la segunda parte de una trilogía eclesiológica. En la primera ha expuesto el autor la teologia biblica sobre la Iglesia en la unidad esencial de la revelacion vetero y neotestamentaria (La Iglesia de Cristo. El Israel de la Vieja y de la Nueva Alianza [BAC Maior 15], Madrid 1977). La tercera parte sera de reflexion estrictamente teologico-sistematica y abordara los problemas mas candentes que tiene planteados hoy la eclesiologia respecto al ser y al obrar de la Iglesia. Comienza esta obra con el despuntar del segundo milenio, porque este señala un momento crucial en la historia de la Iglesia y de la eclesiologia. Sobre todo, porque las publicaciones de otros historiadores del dogma eclesiologico no cruzaron el umbral de este segundo milenio. Un milenio es ciertamente un arco de tiempo tan amplio como para sentir vertigo en cualquier alto del camino hacia atras o hacia adelante. Con todo, esta historia de la eclesiologia ha querido ser completa, ya que abarca la doctrina sobre la Iglesia en el magisterio conciliar y pontificio, en la teologia, en los catecismos y en otros testimonios de la fe de la Iglesia. Extensos son los capitulos en los que el autor presenta la doctrina sobre la Iglesia en los precursores de la Reforma y en los Reformadores. Hay una serie constante de temas eclesiologicos que el autor ha explorado y resumido en los documentos de los concilios, en el magisterio de los papas y en los teologos y canonistas mas representativos durante el segundo milenio: Escritura y Tradicion como principios del conocimiento teologico; nocion de la Iglesia; propiedades del misterio eclesial; sus estructuras jerarquicas y, de modo particular, la relacion concilio-papa y episcopado-primado; mision de salvacion de la Iglesia entre los hombres. La presente publicacion sale a la luz publica cuando se cumplen cuatro lustros de la clausura del Vaticano II, el concilio de la Iglesia y sobre la Iglesia. Ella no podia menos de presentar una exposicion amplia de la doctrina eclesiologica del Vaticano II y de la eclesiologia posconciliar. Al promulgar Pablo VI la LG, aludio este al despuntar de una hora luminosa en la celebracion conciliar ayer lentamente madurada, ahora esplendorosa, mañana ciertamente providencial en su enseñanza, en impulsos, en mejoria para la vida de la Iglesia (Disc. Pablo VI [21.11.1964]: ETV,975). El ayer de la eclesiologia en su desarrollo historico durante el segundo milenio queda descrito en este volumen. El ahora hallara amplio eco en el segundo volumen como punto de convergencia de repetidos esfuerzos renovadores de la eclesiologia a traves de los siglos. Todo concilio es, a un mismo tiempo, el punto de partida de nuevas tentativas de replantear problemas que en la asamblea conciliar no fueron suficientemente discutidos o no encontraron una solucion satisfactoria. Al indicar las mas importantes tareas que la eclesiologia posconciliar esta llamada a abordar, la presente publicacion abre tambien rutas nuevas para una teologia de la Iglesia del futuro.

Esta obra pretende mostrar la diversidad del patrimonio espiritual de la humanidad y descubrir el espíritu de cada confesión -cristianismo, judaismo, islam, hinduísmo, budismo, taoísmo, confucionismo, shinto, religiones de Africa. Partiendo de la diversidad de creencias que se describen, nos invita a reflexionar sobre el hombre religioso de todos los tiempos y civilizaciones.

sta obra sale a la luz con más de cuatrocientos años de retraso. Tiene mucho que ver con otra de igual título editada en Amberes en 1558, cuyo autor, un dominico navarro, acababa de ser nombrado arzobispo de Toledo. El libro se habia escrito precipitadamente, por encargo del Sinodo ingles de Londres (1555), en Inglaterra y para Inglaterra. Y se hizo en la lengua vulgar, pues tenia como finalidad contener la creciente avalancha protestante e iluminar las mentes desconcertadas. Visto desde España, el libro resulto sospechoso de protestantismo. Examinado con lupa —y no sin mala intencion—, se convirtio en un pozo de errores. Muchos obispos y teologos lo leyeron, no encontrando en el nada heretico. La Inquisicion intervino y se pronuncio negativamente. Carranza se mostro dispuesto a corregirlo y a elaborar una edicion nueva. Pero se estreillo contra un muro de silencio. La respuesta fue su apresamiento y el inicio de un proceso que duro diecisiete años.

Tras permanecer agotados durante varios años los cuatro volúmenes del"Año Cristiano"de la colección BAC Normal, irá apareciendo progresivamente, en doce volúmenes, una nueva edición de esta obra. El paso de cuatro a doce volumenes se produce por el notable incremento de biografias ofrecidas; todas ellas situadas en los dias fijados para la conmemoracion de los distintos santos y beatos por el nuevo Martirologio Romano (2001). Esta nueva edicion esta dirigida por Jose Luis Repetto Betes e incorpora, casi en su totalidad, el material incluido en las ediciones anteriores.

La estética teológica nos ha entretenido largo tiempo, y todavía le falta su conclusión ecuménica. Según el proyecto inicial la estética constituye la primera parte de un tríptico. Describe la percepcion del fenomeno de la divina revelacion en su `gloria` diferenciante que nos sale al encuentro del mundo. Quien toma en serio el encuentro, tal como lo describia la Estetica, debe reconocer que el mismo, desde siempore, ya estaba implicado en el fenomeno que nos sale al encuentro: `Uno murio por todos; con eso todos y cada uno han muerto` y no pueden `vivir para si mismos sin para el que murio y resucito por ellos`(2 Co 5, 14s). Ya en el centro de la Estetica ha comenzado la `dramatica teologica`. En el `percibir` se daba desde siempre el `ser arrebatado`.

La estética teológica nos ha entretenido largo tiempo, y todavía le falta su conclusión ecuménica. Según el proyecto inicial la estética constituye la primera parte de un tríptico. Describe la percepcion del fenomeno de la divina revelacion en su `gloria` diferenciante que nos sale al encuentro del mundo. Quien toma en serio el encuentro, tal como lo describia la Estetica, debe reconocer que el mismo, desde siempore, ya estaba implicado en el fenomeno que nos sale al encuentro: `Uno murio por todos; con eso todos y cada uno han muerto` y no pueden `vivir para si mismos sin para el que murio y resucito por ellos`(2 Co 5, 14s). Ya en el centro de la Estetica ha comenzado la `dramatica teologica`. En el `percibir` se daba desde siempre el `ser arrebatado`.

«Este volumen no pretende ofrecer una teología más o menos completa de la Antigua Alianza, sino simplemente hacer resplandecer la esencia de esta alianza desde la perspectiva de la `gloria`».

La obra cuyo primer volumen tiene el lector en sus manos es fruto de un proyecto largamente madurado y desde hace mucho tiempo esperado. Casi siempre la Iglesia, revestida de humildad evangélica y entregada a la accion permanente de anunciar la Buena Noticia y los tiempos de conversion, ha olvidado la oportuna consignacion de muchas de sus realizaciones. Ahora bien, ante el predominante sentido empirico y cuantificador de la ciencia actual y ante los altos grados de incredulidad y sospecha de muchos de los analistas de la realidad historico-religiosa de la Iglesia en España, se hace necesario dejar constancia de lo que, en alguna medida, ella ha realizado a traves de la historia. La primera caracteristica de la presente obra es la novedad. No tenemos conocimiento de que en España, ni fuera de ella, nadie haya intentado presentar el fenomeno historico-educativo de la Iglesia con la amplitud, profundidad y aportaciones ineditas como las que se han incluido en esta obra. Conviene que tampoco deje de advertirse en estos trabajos una buena dosis de oportunidad. Estamos comprobando las dificultades para llevar a cabo en España sucesivas reformas y planificaciones educativas para conseguir modelosnuevos de cultura y ciudadania. La respuesta de la Iglesia, segun apreciamos en esta obra, pudiera ser el ejemplo y marco de referencia oportuno de como intento solucionar en cada momento historico problemas semejantes a los aqui planteados. En ultimo termino, queremos dejar constancia tambien de otra cualidad aqui pretendida: la objetividad. En toda la obra los datos se encuentran suficientemente contrasta-dos con verificaciones documentales y resultados de investigaciones nuevas que salvan cualquier riesgo de subjetividad. Este volumen primero abarca el proceso educador de la Iglesia durante los siglos correspondientes a las Edades Antigua, Media y Moderna. Despues de unos estudios introductorios y dispuesto el marco historico de las relaciones Iglesia, Sociedad y Estado, los distintos capitulos del libro tratan de reflejar la mentalidad cristiana y pensamiento pedagogico de la jerarquia eclesiastica y de los pedagogos cristianos, la enseñanza directa e institucional, la educacion no formal y los recursos pedagogicos adoptados por la Iglesia, asi como la accion social y educadora sobre grupos especiales y de marginacion. Los colaboradores y redactores de todos los trabajos son profesores cualificados en tareas de docencia e investigacion de las principales universidades civiles y eclesiasticas de España. Son nombres conocidos suficientemente en los ambitos de la historia y de la cultura española.

La estética teológica nos ha entretenido largo tiempo, y todavía le falta su conclusión ecuménica. Según el proyecto inicial la estética constituye la primera parte de un tríptico. Describe la percepcion del fenomeno de la divina revelacion en su `gloria` diferenciante que nos sale al encuentro del mundo. Quien toma en serio el encuentro, tal como lo describia la Estetica, debe reconocer que el mismo, desde siempore, ya estaba implicado en el fenomeno que nos sale al encuentro: `Uno murio por todos; con eso todos y cada uno han muerto` y no pueden `vivir para si mismos sin para el que murio y resucito por ellos`(2 Co 5, 14s). Ya en el centro de la Estetica ha comenzado la `dramatica teologica`. En el `percibir` se daba desde siempre el `ser arrebatado`.

La estética teológica nos ha entretenido largo tiempo, y todavía le falta su conclusión ecuménica. Según el proyecto inicial la estética constituye la primera parte de un tríptico. Describe la percepcion del fenomeno de la divina revelacion en su `gloria` diferenciante que nos sale al encuentro del mundo. Quien toma en serio el encuentro, tal como lo describia la Estetica, debe reconocer que el mismo, desde siempore, ya estaba implicado en el fenomeno que nos sale al encuentro: `Uno murio por todos; con eso todos y cada uno han muerto` y no pueden `vivir para si mismos sin para el que murio y resucito por ellos`(2 Co 5, 14s). Ya en el centro de la Estetica ha comenzado la `dramatica teologica`. En el `percibir` se daba desde siempre el `ser arrebatado`.

Tras delimitar la naturaleza del hecho religioso, la obra se centra en el estudio de las ciencias de la religión (historia, antropología, fenomenología, sociología y psicología) y en el análisis de los filosofos que se han ocupado de forma relevante del hecho religioso, cuyos textos mas significativos se recogen. La obra integra los trabajos de 28 especialistas en la materia.