Introducción, traducción y notas de Ricardo Gutiérrez Aguilar. Este breve ensayo, aparecido en la Westminster Review en 1853 y traducido aquí por primera vez al español, fue el que le concedió a Arthur Schopenhauer el reconocimiento que tanto se habia hecho esperar del publico anglosajon, primero y, aleman, despues, cuando el sabio misantropo de Frankfurt se acercaba ya al final de sus dias.