En febrero del 2021, Rosario Bravo, que entonces tenía 97 años, descubrió que le habían entrado en casa. Se la habían vaciado. Al parecer, la comitiva judicial que tenía que proceder a un desahucio se equivoco de puerta. Tenian que ir al atico, pero reventaron la puerta del sobreatico. La comitiva se fue, y a partir de ahi nadie sabe nada. El piso lo saquearon, y unos y otros se escudan y afirman que la culpa es de otro, no suya. Se llevaron incluso los cazos para calentar la leche. Nadie ha pedido perdon a Rosario, que ya tiene 98 años y que solo desea recuperar la fotografia de su marido, la unica que guarda de el, fallecido hace ya medio siglo.
En febrero del 2021, Rosario Bravo, que entonces tenía 97 años, descubrió que le habían entrado en casa. Se la habían vaciado. Al parecer, la comitiva judicial que tenía que proceder a un desahucio se equivoco de puerta. Tenian que ir al atico, pero reventaron la puerta del sobreatico. La comitiva se fue, y a partir de ahi nadie sabe nada. El piso lo saquearon, y unos y otros se escudan y afirman que la culpa es de otro, no suya. Se llevaron incluso los cazos para calentar la leche. Nadie ha pedido perdon a Rosario, que ya tiene 98 años y que solo desea recuperar la fotografia de su marido, la unica que guarda de el, fallecido hace ya medio siglo.