Cuentos de derviches recoge textos remozados y occidentalizados por Idries Shah. Se trata de una obra didáctica y doctrinaria, embellecida por el encanto de las narraciones tradicionales del Asia milenaria y su clima fantástico y poético. Idries Shah, diestro cuentista que combina el lirismo de Tagore con la serena sabiduría de Krishnamurti, es el más alto exponente del mundo del sufismo (antiguo pensamiento tradicional islámico, para algunos místico, para otros un cuerpo de conocimientos morales) y procura hacer accesibles a Occidente aquellos aspectos del sufismo que le serían muy beneficiosos, transmitiendo la enseñanza moral y espiritual sufí a través de situaciones muy simples e ingeniosas -analogías, parábolas, apólogos, proverbios- que encierran mensajes de enseñanza interior y de agudo conocimiento del hombre y de la vida. Introducción de Robert Graves.
Ficha técnica
Traductor: A. H. D. Halka
Editorial: Ediciones Paidós
ISBN: 9788475090788
Idioma: Castellano
Número de páginas: 240
Tiempo de lectura:
5h 40m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 01/07/1981
Año de edición: 1981
Plaza de edición: Es
Colección:
Orientalia
Orientalia
Peso: 244.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Idries Shah
Autor y maestro situado en la cima del conocimiento secreto de la tradición Sufi, Idries Shah fue un prolífico escritor con una enorme repercusión popular: sus libros abarcan desde la psicología y la espiritualidad hasta los cuentos de sabiduría y los estudios culturales. Considerado como el gran divulgador del Sufismo en Occidente, nació en Simla, India, en el seno de una familia de la nobleza afgana, y fue educado en Inglaterra. Distinguido con títulos como Sayed (descendiente de Muhammad), Hadrat (La Presencia) o Gran Sheikh de la Tariqa Naqhsbandi, su manera de enseñar generaba desconcierto y solía provocar las iras de los académicos, así como la admiración de personalidades como Doris Lessing, Ted Hughes, Robert Graves, J.D. Salinger o Jorge Luis Borges. Su sentido del humor y sus ideas sobre la atención y la intuición, hoy comúnmente aceptadas, hacen de su obra un constante aprendizaje contra el ego y un vehículo imperecedero hacia la consciencia.