La poesía de Cesar Vallejo (1892-1938), desde Los heraldos negros (1918) hasta España aparta de mi este cáliz (1939) está marcada por una catarsis emotiva y verbal. En Vallejo hay un solo camino a seguir, una corriente interna que aparece en su primer libro y ocurre tambien en sus libros posteriores incluyendo sus poemas póstumos. El poeta escribe sobre la madre, el padre, el hermano ausente, la ciudad y sobre los estados emocionales de la niñez y los adultos. Su obra poetica es una unidad, un todo que no culmina, y que a traves de sus temas recurrentes va cuajando profundamente una poetica original. Es un error común encasillar su obra dentro de un solo marco, y olvidar otros temas relevantes como el amor y la solidaridad con el genero humano. De Vallejo no solo debe hablarse de sus aparentes “quiebres” en el lenguaje de Trilce. Su poesía va más allá de estas aparentes fracturas.
Ficha técnica
Editorial: Valparaiso Ediciones S.L.
ISBN: 9788418082696
Idioma: Castellano
Número de páginas: 240
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 19/04/2021
Año de edición: 2021
Plaza de edición: Granada
Colección:
Colección Poéticas
Colección Poéticas
Número: 11
Alto: 21.0 cm
Ancho: 13.5 cm
Especificaciones del producto
Escrito por César Vallejo
César Abraham Vallejo (Santiago de Cucho, Perú, 1892- París, 1938), considerado como uno de los mejores poetas de Perú, escribió también obras narrativas, las cuales presentamos en este libro. En 1913 ingresó en la Universidad de La Libertad (Trujillo), donde se graduó como bachiller con una tesis sobre el Romanticismo en la poesía castellana. Por aquellos años se asoció al denominado grupo “Norte”, entre cuyos integrantes estaban Antenor Orrego, Macedonio de la Torre y Alcides Spelucín, entre otros. En 1918 viajó a Lima para estudiar un doctorado en la Facultad de Letras de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y ese mismo año publicó su primer libro, titulado Los Heraldos Negros. En 1920 fue encarcelado durante tres meses por un desafortunado incidente, un periodo en que escribió Escalas melografiadas, cuya característica principal, según los críticos, es su “prosa desgarradora”. El autor, considerado el máximo representante del Vanguardismo en su país, viajó después a Europa, en 1923, y visitó París, Madrid, Moscú, Budapest, Bruselas y Berlín. Finalmente se asentó en el continente, donde vivió quince años, y se casó con la francesa Georgette Philipard. Lejos de su país escribió Rusia, Reflexiones al pie del Kremlin (1931), Tungsteno y una obra de teatro llamada Lock-out. Vallejo careció de recursos económicos en Europa; al principio vivió de los artículos periodísticos y ensayos que enviaba a distintas revistas. Al respecto, Luis Alberto Sánchez escribió: “Europa fue terrible para Vallejo. Un hombre como él, todo sensibilidad, sencillez y contemplativo ocio, sin inquietudes políticas, generoso y discurridor, no tenía qué hacer”.